Ah, y con mi padre, ningún problema. Le dije "papá, eres mi padre y la persona que me va a llevar al altar, así que tienes que ir guapísimo, jeje!". Fuí con él una tarde a una sastrería y en una hora ya teníamos elegido el modelito.
En cambio, con mi madre la cosa fue más difícil, no le gustan los vestidos largos pero al final, entre mi hermana y yo, la convencimos!
Neny